El acercamiento y el contacto con las usuarias, tiene lugar en los lugares donde las mujeres ejercen la prostitución (calle, clubs y pisos). Lugares donde se evidencia su aislamiento y se hacen patentes las barreras internas y externas que les impiden utilizar los recursos necesarios para su integración social. Esto nos aporta un testimonio directo y una comprensión más próxima de su realidad.
- La fase de acogida a la que, además de las personas contactadas directamente, nos llegan también mujeres derivadas de otros servicios o que conocen el recurso por otras usuarias.
- El acompañamiento individual, basado en la cercanía y en la relación implicativa. Supone el establecimiento de un vínculo que posibilite y favorezca el despliegue de las posibilidades de cada persona y que actúe como mediador entre la persona y su entorno social, propiciando su acceso a los recursos que ofrece la comunidad y su integración en la misma.
- Se trabaja con planes de intervención personalizados y especifico para aquellas áreas (sanitaria, social, jurídica, formativa, laboral, emocional…) que se perciben más deficitarias y su consiguiente seguimiento y evaluación.